La frase bíblica (una cita del Evangelio de San Lucas) abre el relato de la Visitación (la visita de María a su prima Isabel), un episodio bíblico que se sigue a la Anunciación (el anuncio del ángel a María de que iba a ser la madre del Hijo de Dios, que fue el tema de la última JMJ, en Panamá).
En la conversación que mantiene con María, en la Anunciación, el ángel también le dice que su prima, una anciana considerada estéril, estaba embarazada. Es entonces cuando María, después de decirle al ángel: “He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra” (Lc 1, 38), emprende el camino hacia Ein Karem, una aldea cerca de Jerusalén, donde Isabel vivió mientras esperaba el nacimiento de Juan, quien se convertiría en San Juan Bautista.
María de Nazaret es la gran figura del camino cristiano, que nos enseña a decirle sí a Dios.
Fue la protagonista de la última edición de la JMJ y también lo será en Lisboa.
En el episodio bíblico de la Visitación, la acción de levantarse presenta a María, simultáneamente, como mujer de caridad y como mujer misionera. Partir sin demora resume la actitud plasmada por el Papa Francisco en sus instrucciones para la JMJ Lisboa 2023: “Que sea activa y misionera la evangelización de los jóvenes, que asimismo reconocerán y serán testigos de la presencia de Cristo vivo”.
Dirigiéndose especialmente a los jóvenes, desafiándolos a ser valientes misioneros, el Papa escribe en la Exhortación Apostólica Christus Vivit: “¿Adónde nos envía Jesús? No hay fronteras, no hay límites: nos envía a todos. El Evangelio no es para algunos sino para todos” (CV 177).